La localización de la ciudad de Cartagena de Indias la dota de características biofísicas especiales que le permiten contar internamente con un sistema de cuerpos de agua lagunares que por interconectarse entre sí y estar rodeados de manglar en algunos tramos, forma un corredor biológico que atraviesa el casco urbano de la ciudad desde el barrio Crespo hasta el barrio Manga pasando por los barrios Marbella, Cabrero, Centro Histórico, Pie de la Popa y Bazurto.
Este corredor biológico, que se considera una de las principales estructuras ecológicas de la ciudad y que además rodea al accidente geográfico más elevado de Cartagena conocido como el Cerro de la Popa, se conforma de seis cuerpos de agua, el primero, que se conoce caño de Juan Angola, inicia en la ciénaga de la Virgen inmediatamente al sur de la pista de aterrizaje del Aeropuerto Rafael Núñez y sigue paralelo a la Avenida Santander, hasta encontrase con el segundo cuerpo de agua que toma el nombre de Laguna del Cabrero. La Laguna del Cabrero tiene sus límites entre el puente Benjamín Herrera hasta el puente de Chambacú; en ese punto inicia el tercer cuerpo de agua denominado Laguna de Chambacú, el cual finaliza en el puente Heredia, donde inmediatamente se encuentra con el cuarto cuerpo de agua conocido como la Laguna de San Lázaro. Esta laguna se interconecta con el Caño de Bazurto en el punto donde se encuentra el Puente Las Palmas. El caño de Bazurto que es el quinto cuerpo de agua corre paralelo a la avenida del Lago hasta desembocar, a la altura del puente Jiménez, en el sexto y último cuerpo de agua conocido como la Ciénaga de las Quintas que se conecta con la bahía de Cartagena en el puente Bazurto.
El conjunto de estos cuerpos de agua es conocido como el Sistema de Caños y Lagos internos de la ciudad de Cartagena, y según el Plan de Ordenamiento territorial de la ciudad se divide en eje 1 y eje 2.
De acuerdo a lo plasmado en el estudio de (Instituto de Hidráulica y Saneamiento Ambiental, 2014); las rondas de estos cuerpos de agua han sido invadidas durante los últimos 60 años, desplazando algunos tramos de manglar y dando cabida a actividades residenciales, comerciales, institucionales y portuarias, en algunos casos formales y en otros clandestinos, que además de confinar y reducir sus espejos de agua, vierten aguas residuales sin ningún tipo de tratamiento y disponen residuos sólidos de forma inadecuada.
Adicionalmente estos cuerpos de agua son receptores de las consecuencias que se derivan del fenómeno de invasión y deforestación del que ha sido testigo el Cerro de la Popa. La pérdida de cobertura vegetal que ha presentado este cerro, ha ocasionado que sus suelos se deterioren y sean más propensos a sufrir procesos de erosión. De esta forma se generan sedimentos que en épocas de lluvia son arrastrados por las escorrentías hasta depositarse, en su gran mayoría, en el sistema de Caños y Lagos internos.
Todo lo anterior ha provocado que la calidad fisicoquímica, microbiológica y biológica de estos cuerpos de agua y del ecosistema de mangle que los rodea se vea impactada negativamente, llegando hasta el punto de presentar cambios aparentes en la concentración del oxígeno disuelto en los años que transcurrieron desde 1982 hasta 1994 y 1999 una concentración de 0 mg/L. Como resultado del cambio de estos parámetros, se ha deteriorado la diversidad del sistema a causa de la perdida de hábitats esenciales, se puede afirmar de acuerdo a los resultados arrojados que las especies de este sistema tienden a adaptarse rápidamente a su medio y si este cambia simplemente perecen. El motivo de la desaparición de las especies es la alteración o desaparición de su hábitat. Como soporte de esta información, se encuentran los estudios que se han publicado desde hace una década (Ensuncho, García, & Ustáriz, 1995) donde muestran que la biodiversidad afecta a la productividad de los ecosistemas. La pérdida de especies reduce los bienes y servicios que los ecosistemas proporcionan a la sociedad (alimentación, agua potable y un clima estable).
Actualmente los cuerpos de agua del sistema de caños y lagos, donde más se ven reflejadas las situaciones antes expuestas son: el Caño Juan Angola y la Ciénaga de las Quintas.
Ahora bien, es importante destacar que no todo ha sido negativo. En los últimos seis años el distrito de Cartagena ha realizado una serie de acciones urbanas, sobre las rondas de estos cuerpos de agua, que han ayudado a protegerlos y a mejorar su calidad. Entre estas acciones se destaca: el Parque lineal puerto duro, declaración de zona de protección como el parque del manglar, Complejo de Raquetas, cerramiento con mallas de protección de la Ciénaga de las Quintas, parque lineal con ciclo rutas y zonas peatonales del pie de la popa.
El mejoramiento en la calidad se demuestra analizando los datos de calidad de agua para las concentraciones de oxígeno disuelto, donde de algún modo han mejorado paulatinamente y de manera intermitente con la implementación de proyectos como la Bocana estabilizada de mareas en el año 2001 y la puesta en marcha del emisario submarino de la ciudad de Cartagena en Marzo del año 2013, sin embargo las rondas y los espejos de agua de este sistema aún presentan inconvenientes por parte de la falta de cultura de algunos de sus ciudadanos, con descargas sin control fuera del sistema de alcantarillado, utilización de los mismos como botaderos satélites de residuos sólidos e invasión de sus rondas en diversos sectores, lo que afecta notoriamente la calidad del mismo.
No obstante, se siguen evidenciando prácticas humanas inadecuadas alrededor de estos cuerpos de agua que los afectan. De esta forma queda claro que la tarea no está finalizada y por tanto es necesario seguir implementando acciones que ayuden a recuperar de un todo este importante sistema ecológico de la ciudad.
El sistema de caños y lagos internos de la ciudad está limitado al norte y al sur por cuerpos de agua de mayor extensión como son la ciénaga de la Virgen y la bahía de Cartagena, respectivamente; y, al oriente y occidente por viviendas de uso residencial y comercial. De acuerdo al estudio (Fondo Nacional de Desarrollo- FONADE; Ingenieros Consultores- HIDROTEC; Empresa de Desarrollo Urbano de Bolívar- EDURBE, 1984), en promedio, el área superficial del sistema interconectado de cuerpos de agua internos de la ciudad es de 100 Ha.
Para la descripción de cada cuerpo de agua se tomó el informe de (Reales & Esquivia, 2010), presentado a continuación:
Caño Juan Angola
Este cuerpo de agua inicia en la Ciénaga de Tesca, inmediatamente al sur de la pista de aterrizaje del Aeropuerto Rafael Núñez y sigue paralelo a la Avenida Santander cambiando sucesivamente de nombre, adoptando la designación de Laguna de Marbella, Cabrero y Chambacú, para finalmente conectarse a través de la Laguna de San Lázaro con la Bahía interna de Cartagena. Tiene una longitud aproximada de 4.12 Km., un espejo de agua de unas 10 hectáreas y con una profundidad promedio de 2.76 m
Laguna El Cabrero
Este cuerpo de agua comienza desde el puente Benjamín Herrera hasta el puente de Chambacú. Tiene una longitud aproximada de 1.38 Km., un espejo de agua de unas 26 hectáreas y una profundidad promedio de 2.3 m.
Laguna de Chambacú
Este cuerpo de agua comienza desde el puente del mismo nombre hasta el puente Heredia, tiene una longitud aproximada de 0.49 Km., un espejo de agua de unas 7 hectáreas y con una profundidad promedio de 2.2 m.
Caño Bazurto
Circula hacia el suroeste de la ciudad, desde el puente Las Palmas a la altura de la Bahía San Lázaro y corre paralelo a la avenida Del Lago hasta desembocar en la ciénaga Las Quintas a la altura del puente Jiménez. Tiene una profundidad promedio de 1.73 m., con una longitud aproximada de 1.2 Km. y 12 hectáreas de espejo de agua.
Ciénaga de Las Quintas
El sistema comienza desde el puente Jiménez hasta la Bahía de Cartagena, en el puente Bazurto. Tiene una profundidad de 2.25 m., con una longitud aproximada de 1.29 Km. y como espejo de agua unas 30 hectáreas.
Laguna de San Lázaro
Este cuerpo de agua comienza desde el puente Heredia, hasta la Bahía de Cartagena, en el puente Román. Tiene una longitud aproximada de 0.67 Km., un espejo de agua de unas 15 hectáreas y una profundidad promedio de 2.1 m.