El diagnóstico de la población mayor en el distrito Cartagena de Indias se expondrá atendiendo a los datos de pobreza emitidos por el SISBEN basados en la información general del distrito (con una base de 46.713 PM) y el diagnóstico de la política pública Distrital de Cartagena de Indias basado en una muestra de 1774 personas mayores usuarios de Centros de Vida CDV y a una caracterización de la población mayor de 60 años en Cartagena realizada en el marco de una investigación de la facultad de enfermería de la Universidad de Cartagena en 2009.
Es pertinente atender al diagnóstico de la política pública y a su muestra puesto que los principales beneficiarios de los programas, planes o proyectos del distrito son las personas mayores en CDV, esta población ha ido en aumento gracias a la ampliación de cobertura propuesta en el plan de desarrollo anterior. Así pasamos de atender 24 CDV a atender 30 y de prestar servicios a 104 grupos organizados a cerrar en 2015 con 114 grupos Organizados.
Según datos del SISBEN la tasa de pobreza de la población mayor del Distrito es de un 67%. Por otra parte, según diagnóstico de la política pública distrital de envejecimiento y vejez, la tasa es del 80%. Se encuentran como posibles causas de esa amplia tasa que la población mayor es un su mayoría analfabeta, SISBEN presenta un 23%, y se encuentra en la política pública que el 75% no culminó la educación primaria; el 0,4% tiene formación técnica.
Además, el 78% no cuentan con pensión, el 80% no trabaja y, el 20% restante se dedica a la economía informal. De allí que existe una alta tasa de pobreza, expresada en los índices de NBI e incluso en el deterioro mental del adulto mayor. La valoración mental realizada en el marco de una investigación de la universidad de Cartagena identificó un deterioro leve y moderado en el 87% de la población mayor del distrito.
En el sector poblacional de personas mayores se resalta como situación positiva la organización de la sociedad civil que cuentan con el Concejo de venerables como máxima instancia de representación, así mismo existen 114 organizaciones y en el periodo anterior se conformaron veedurías por localidades. Otra situación positiva es el aumento en la denuncia de casos de abandono y maltrato en este grupo poblacional.
Sin embargo, pese a que el índice del maltrato Distrital es del 0.82%, atendiendo al número total de población mayor (68.866 según SISBEN); en 2014 se atendieron (gracias a las denuncias) 385 casos de maltrato y abandono en el distrito evidenciando un incremento del 85% en el indicador que en 2011 señaló sólo 180 casos de abandono. De allí que el reto más importante es el cierre de brecha en el índice de abandono y maltrato.
Así mismo, pese a la existencia de organizaciones de base, de veedurías y del aumento en un 100% del número de participantes a los espacios de toma de decisiones que pasaron de ser 174 en 2011 a participar 309 en 2014. Los liderazgos se presentan débiles, hace falta una agenda clara y articulación entre las organizaciones; por ello se hace necesario un proceso de fortalecimiento a las personas y a las instituciones conformadas.
En cuanto al acceso a servicios, el 92% de personas mayores se encuentran afiliadas a una EPS subsidiada, para el 36% el puesto de salud está lejos y para el 14% muy lejos la distancia de estos centros de atención, así como de las droguerías y las condiciones de transporte y movilidad tanto en la zona urbana como rural son un obstáculos para el acceso a los servicios. La atención diferencial y prioritaria no va más allá de ceder en el turno de información o de adquirir un bien, pero en la prioridad e integralidad de los servicios no se evidencian resultados. Esto obedece en parte, a la ausencia de profesionales con conocimientos específicos de gerontología y geriatría.
Por último, se encuentra poca capacidad de articulación para la atención integral a las personas mayores y el cumplimiento en la implementación de la política pública Distrital de envejecimiento y vejez. Esta determina unas competencias a las diferentes dependencias e instancias del distrito para atender al enfoque diferencial de vejez y garantizar el goce pleno de los derechos de la población mayor.
Atendiendo a estas circunstancias en el Distrito se requiere mejorar las condiciones de acceso y accesibilidad a los servicios y atención de la población mayor. Al mismo tiempo se debe apuntar a elevar los niveles educativos, al mejoramiento del desarrollo cognitivo, la optimización de la atención y la garantía de derechos.
Articulado con la política pública de envejecimiento y vejez en el marco del enfoque de derechos y la protección social garantizaremos a las personas mayores las condiciones de accesibilidad para mejora su condición de vida con fundamento en cuatro principios: Promover su independencia, propiciar su autorrealización, garantizar protección, el reconocimiento y participación. Para se proponen los siguientes programas.